QUERER ES PODER

Quiero descansar mis ojos

en tu limpia mirada.

Quiero ser el colchón

para cuando estés cansada

y contra el frío del invierno

también quiero ser tu manta.

Quiero acariciar tu piel

y abrazarme a tu alma

y respirar tus suspiros

cuando nuestros besos mandan.

Quiero ser el suave viento

que te molesta en la cara,

pero luego te susurra,

cada día estás más guapa.

Quiero cumplir tus deseos

aunque tú seas el hada.

Quiero lo que no puedo

en una situación  extraña

con un montón de secretos

y de verdades cortadas.

Quiero que confíes en mí

y ser yo tu confianza.

Quiero mostrarte con hechos

lo que digo con palabras.

Quiero, que ya no es poco

y me gusta y no me cansa.

TU ESENCIA

El suspiro de tu alma

 en forma de olor me vence

en una lucha de aromas

 entre tu cuerpo y mi  mente

tu fragancia crea heridas

 sin un dolor aparente

cosiendo de cicatrices

 mis recuerdos recurrentes.

El sabor de tu perfume

 ha decidido mi suerte

una vez te he olido,

  me embaucaste  para siempre.

TU PELO

Bandera unicolor

que ondea con el viento.

Velo con el que ocultas

tu sonrisa por momentos.

Seda con la que haces

el sombrero más perfecto.

Cortina con la que impides

que la luz toque tu cuerpo.

Caminito liso y suave

por el que andan mis dedos.

Rio que cambia su curso

a merced de tu movimiento.

Pañuelo con el  que escondes

la desnudez de tu cuello.

Juguete al que acaricias

para ir matando el tiempo.

Campo de trigo oscuro

cultivado con esmero.

Cascada negra sin agua

que no llega a tocar suelo.

Fular con el que te abrigas

cuando viene el frio invierno.

VERDES TESTIGOS

Caminando por un bosque

adornado con alisos

todos semejan iguales

aunque  todos son distintos,

se encuentran mudos de envidia

por un día ser testigos

del primogénito beso

entre nuestros labios tímidos.

Inmóviles observaron

nuestras muestras de cariño,

arrugaron su corteza

intentando hacer lo mismo,

llorando lágrimas de hojas

al no poder conseguirlo.

Enlazamos nuestros troncos

en un abrazo infinito

haciéndoles sentir rabia

por nuestro amor primerizo.

Los dejamos a su suerte

inconscientes de lo ocurrido,

sin saber que se hacían daño

al ver lo que nos quisimos.

SOY TU ORILLA

He soñado que eras mar

y que yo era tu orilla.

Con espuma escribí tu nombre

seguro de que volverías.

Me abrigue con tus ropajes

de agua salada y fría.

Me peleé con tus olas

en eternas embestidas.

Te has cubierto cada noche

con traje hecho a medida,

un vestido color negro

con lentejuelas infinitas.

Tuviste amantes náufragos

que te entregaron su vida

y los arrojaste a mis manos

cuando ya no los querías.

Has sido madre de golfos,

de cabos y de bahías,

también fuiste testigo

de múltiples despedidas.

Besando tu piel azul

desperté sin compañía.

He soñado que eras mar

y que nunca serías mía.

LA BOCA

Ostra que guardas perlas

de un blanco casi perfecto.

Fuente de los susurros.

Mazmorra de los silencios.

Tatuadora de adolescentes

para marcarse los cuellos.

Salida de los suspiros.

Sepultura de alimentos.

Herramienta de la gula.

Perdición de los obesos.

Grieta que acaba filtrando

las mentiras y los secretos.

Cañón que dispara gritos

por el dolor y el miedo.

Es instrumento de cuerdas

pero también lo es de viento.

Generador de sonidos.

Altavoz de pensamientos.

Puerta abierta por las sorpresas.

Hogar del último aliento.

Cueva de las palabras.

Laberinto de los besos.

Madriguera de sonrisas.

Pozo de los deseos.

  

EL VIENTO

Personaje antiguo,

mensajero del cielo,

nunca ha sido visto

en sus muchos movimientos.

Asesino de las flores,

temor de los marineros.

Instigador de las olas

en su suicidio eterno.

Emisario del otoño,

sicario del frio invierno.

Genocida de las hojas,

cazador de árboles viejos.

También puede ser suave

y agradable por momentos.

acunando las olivas

en sus balcones efímeros.

Se divierte a su manera

poniendo todo su empeño

en las chicas descuidadas

presumidas en exceso,

levantándoles la falda,

despeinándoles  el pelo.

LOS RAYOS

Grietas ardientes y fugaces

de un cielo gris encapotado.

Muestras de la ira de Zeus,

rugir de los dioses enfadados.

Iluminas con tu luz lugares

de donde antes la has quitado.

Judas que besas la tierra

para hacerle siempre daño.

Raíz  efímera

de los árboles nublados

que alimentas con tu salvia

a sus frutos los chubascos.

Creadores momentáneos

de amaneceres extraños.

Fuegos artificiales

de las fiestas del diablo.

NOCHE EN LA PLAYA

Una noche en la playa

te vi caminando a solas,

intenté acompañarte 

pero me echaron las olas.

Me refugié en las rocas

reprimiéndome mis celos

mientras tú le acariciabas

con la punta de tus dedos.

Era al mar a quien amabas,

ya no pienso ni en luchar,

contra un amante tan bello

ni me puedo comparar.

Cuando cabizbajo iba

te acercaste por detrás 

y con sólo dos palabras

me volviste a reanimar.

Nunca he vuelto a escuchar

un sonido tan  sincero

de una boca tan bella

que ese día dijo, te quiero. 

TUS PÁRPADOS

Hermanos de ojos,

rastrillo de lágrimas,

sedas que acarician

el cristal de tus miradas,

partitura en la que se lee

una canción de pestañas,

cortinas que cubren

a los espejos del alma,

suaves nubes que ocultan

a los luceros del alba.

EL LOBO Y LA LUNA

El lobo aúlla de noche

desde la extensa meseta

reclamando la atención

de su amada que se aleja,

quien cruzando el horizonte

en el agua se refleja

y  se rompe en mil pedazos

cuando su hocico la besa.

A  veces viste de noche

y se esconde estando nueva

pero cuando viste de blanco

desborda luz de tan llena

mostrando la misma cara

para verse siempre bella

y enamorar a su lobo

que aúlla por poseerla. 

TÚ ERES MÍ ESTACIÓN

Acariciaste la piel 

de árboles pudorosos

tocando la desnudez 

de los sauces y los chopos.

Despertaste con tus pies

las hojas ebrias de otoño

que añoraban a su árbol

tanto como yo te añoro.

Maduraste mis emociones

con el calor de tus ojos,

sin tu luz no soy la sombra 

que sigue a tu cuerpo hermoso.

Has sido mi primavera

cuando me lo diste todo

pero fuiste mi invierno 

cuando me dejaste solo.

LA TUMBA

Bostezo de tierra oscuro.

Antónimo de un saliente,

que en tu desdentada boca

la oscuridad es patente.

La gran desgracia que guardas

en tu garganta profunda

no es otra sino la muerte

de ahí tu nombre, la tumba.

TUS PENDIENTES

Racimos dorados cuelgan

maduros con luz de tu piel,

atrapados en tu preciosa melena

que permite que sean vistos

cuando el viento lo desea.

Recogen el polen de los sonidos

tus dos orquídeas pequeñas

y soportan los movimientos

de las joyas que las atraviesan.

Dos rayos de luz solar 

en el metal se congelan 

para hacerte más hermosa

al descender tus orejas.

Se mueven siempre que quieren

pero al amor lo respetan 

pues se paran y están quietos

cuando mis labios te besan.

ACRÓSTICO AURORA

Amanece en tus ojos

Una mirada perfecta

Resplandeciendo en el alba

Ocultando las estrellas.

Reloj de luz que precede

Al sol que siempre despierta

EL TIEMPO

Él camina sin pararse

sin mirar atrás con miedo

por un sendero infinito

estrecho y polvoriento.

Viaje sólo de ida,

imposible su regreso.

Tren de vagones eternos

que transportan los momentos.

Río sin desembocadura

y también sin nacimiento.

Campo fértil donde crecen

los tallos del sentimiento,

tallos cortos de alegría

y largos de sufrimiento.

Ladrón de las juventudes.

Leñador de los cabellos.

Los únicos que te vencen,

los recuerdos y los sueños.